Alberto y Jose nos acompañaran durante una semana por tierras escocesas y luego ellos volverán, mientras que Silvia y yo recorreremos la parte norte durante 7 días mas.
Un par de vuelos (Bilbao-Londres / Londres - Glasgow) nos llevan a Glasgow donde nos aguarda Ivan, el hijo de Jose, que reside temporalmente aquí y que sera nuestro compañero y guia durante unos días.
Después de un "inolvidable" viaje nocturno en coche (jodido eso de bajarte del avión, coger un vehículo de alquiler con el volante a la derecha y ponerte a conducir por primera vez por la izquierda por carreteras mas bien estrechas y de noche bajo una lluvia torrencial) conseguimos llegar a Fort Williams.
Fort Williams, que nos servirá de "campamento base" durante unos días, esta situado en las Highlands o Tierras Altas escocesas.
No vamos a perder el tiempo: en nuestro primer día en Escocia iremos a por su montaña mas alta y mas emblemática, el Ben Nevis.
De Fort Williams conducimos unos 4 km hasta la entrada del aparcamiento del Centro de Visitantes del Valle Nevis (Glen Nevis) y dejamos ahí el coche.
Desde ahí parte la Pony Track o Ruta Pony, la ruta de ascenso normal y la mas ¿¿concurrida??.
Nuestros primeros pasos nos internan en el Glen (valle) Nevis.
Pronto el marcadísimo sendero se desvía a la izquierda para pasar por delante de Achentee Farm e ir ganando suavemente altura por la falda de la montaña.
"Portate bien hoy y no lies ninguna ¿eh, majo?".
Ivan, nuestro Indiana Jones particular, nos comenta que aprovechemos mientras se pueda para hacer fotografias ¿porque lo dira?.
Glen Nevis.
La ruta a seguir no va a ofrecer la menor duda, eso esta claro, es cuestión de seguir el empedrado.
Ganando altura.
Va a ser que por eso decía Ivan lo de las fotos: poco antes de llegar al lago llamado Lochan Meall an t-Suidhe (ni lo intentéis pronunciar) nos metemos en la niebla.
Aunque no se ve gran cosa aquí el sendero esta tan marcado que seria muy difícil perderse.
Cruzando el barranco Red Burn: estamos en la mitad de la subida al Ben Nevis.
Ivan ascendiendo con Lochan (Lago) Meall an t-Suidhe detrás y con el Loch Linne y Fort Williams al fondo.
Loch Linne.
Glen Nevis (es el nombre del valle de abajo, no del señor de negro...).
La montaña esta hoy muy concurrida pero eso es algo muy habitual: se calcula que unas 100.000 personas la visitan cada año y os aseguro que habrá muchos días en los que no se le ocurrirá a nadie asomar el hocico por aquí, así que echad cuentas...
El lago va quedando abajo y nosotros vamos recorriendo el zigzageante camino que recorre la ladera este del Ben Nevis.
"Indiana" sigue dándole a la cámara.
Pero enseguida la niebla vuelve a cubrir la subida.
A mi lo de las 100.000 personas al año me sonaba muy raro pero como la media diaria sea la de hoy...se queda corto.
La paradita para la cerveza y el picoteo rápido es obligatoria, da igual donde estemos.
Larga subida la que discurre por esta ladera.
Y todavía hay que alcanzar la parte alta (flecha azul) para recorrer el tramo final.
Mas niebla y parece que ahora trae intención de quedarse de forma definitiva.
9 de agosto, a 1.200 metros de altura y pisando nieve...¡¡ Welcome to sottish summer !!
La presencia de esos grandes montones o hitos de piedra tiene su buena razón.
Los encontramos cerca de la cima, en una zona situada entre Gardyloo Gully y Five Finger Gully (gully: barranco, cortado) en la que si no te sales del ancho camino no hay ningún peligro, pero como este cubierto de nieve y la niebla sea muy densa o te desorientes...
....puedes acabar encaminándote hacia uno de los laterales y a ambos lados espera un gran vacío: a la izquierda Gardyloo Gully (foto) y a la derecha Five Finger Gully.
A los pocos minutos de dejar atrás ese tramo llegamos a una zona muy amplia donde parece que esto se acaba.
Efectivamente, se acabó y aquí estamos: Ivan, Jose, Javi, Silvia y Alberto en la cima del Ben Nevis (Beinn Nibheis en gaélico escoces), a la que sus modestos pero exigentes 1.344 metros de altura la convierten en la montaña mas alta de Escocia y de todo Gran Bretaña.
Primer día en Escocia y en la cima del Ben Nevis: satisfechos y contentos.
Nos ponemos a resguardo del frio y el fuerte viento para almorzar: de las vistas no disfrutaremos, no, pero del bullicio de la cima...
Menuda la que tienen montada en el vértice geodésico esa cuadrilla de iranies y palestinos.
En el gran plató cimero se pueden observar todavía los restos de dos antiguas construcciones: aquí en 1883 se construyo un observatorio meteorológico que estuvo operativo durante 21 años y una segunda construcción, el hotel Temperance, proporcionó alojamiento a los escaladores durante los meses de verano entre 1894 y 1916.
Silvia pasando al lado de una de las esquinas de lo que fue el observatorio.
De izquierda a derecha: el montón de rocas que señala la cima del Ben Nevis, el observatorio y el Hotel Temperance (foto de 1910).
Vale de repasar la historia que aquí arriba hace entre bastante y mucho frío, así que para abajo, pero antes de iniciar el descenso una de recuerdo para la gente de nuestro club de montaña.
Sigue subiendo y bajando gente y por supuesto, como ocurre en todos estas montañas tan concurridas, te encuentras de todo.
Mejor admirar el paisaje: Lochan (Lago) Meall an t-Suidhe, la colina del mismo nombre y el Loch Linne (fiordo del fondo).
Anda que no baja contento Ivan: el ya había estado en esta montaña alguna vez pero el mal tiempo siempre le había echado para atrás.
Llegamos a la altura del lago, nos salimos del sendero y aprovechamos los escasos rayos de sol (los recordaremos con añoranza durante toda nuestra estancia en tierras escocesas) para hacer una breve parada.
- Estas cervezas tienen que estar buenas ¿no?
- Solo hay una forma de saberlo, compañero.
"Bebamos...
.....y meemos"
Desde el lago observamos la cara este del Ben Nevis por la que hemos ascendido y descendido, dividida por el arroyo y el barranco Red Burn.
Bajando hacia el valle.
Pues si que tiene una cuesta, si...
Las praderas de Glen Nevis las tenemos ya a tiro de piedra.
Y ya tan solo nos queda cruzar el puente sobre el rio Nevis para acceder al aparcamiento, coger el coche y poner rumbo a Fort Williams.
Por el camino podemos observar desde lejos la impresionante mole del Ben Nevis, una montaña fácil de ascender (con buen tiempo) pero que tiene un desnivel y una pateada serias (1.320 metros y unos 16 kilómetros).
Y una vez en el alojamiento, para celebrar la ascensión, inauguramos nuestra primera botella de delicioso whisky escoces (cosa que hubiesemos hecho de igual modo aunque no hubiesemos pisado ni una sola piedra en el día de hoy).
DATOS DE INTERÉS (Orientativos)
Distancia recorrida: 16 kilómetros.
Tiempo ascenso: 3 horas 10 minutos (sin contar parada de 10 minutos para picoteo).
Tiempo descenso: 2 hora 35 minutos (sin contar parada en el lago).
Desnivel: 1.320 metros.
Un par de croquis para ayudar a visualizar la ruta:
En azul la linea correcta a seguir tanto en el ascenso como en el descenso: